El concejal capitalino Carlos Arnedo (Acción Vecinal) expresó su firme rechazo al reciente aumento en los combustibles y a las elevadas tarifas de los servicios públicos dispuestas por el Gobierno Nacional, y advirtió que estas medidas “golpean directamente el bolsillo de los trabajadores y de las familias tucumanas”.
“El incremento de los combustibles no es un hecho aislado: cada suba se traslada a los precios de los alimentos, al transporte, a los servicios y a la producción en general. Esto significa más inflación y más presión sobre los que ya están haciendo un esfuerzo enorme para llegar a fin de mes”, señaló el edil.
En ese sentido, Arnedo remarcó que “la gente aún se está reponiendo del último aumento en las tarifas de luz y gas que entró en vigencia hace apenas dos meses. No pueden seguir aumentando todo sin contemplar la realidad económica de la mayoría de la población”. “En un contexto de alta inflación y pérdida del poder adquisitivo, los aumentos en electricidad, agua y gas se convierten en una carga insostenible para miles de hogares”, apuntó.
El concejal consideró que estas decisiones “son otra muestra de que el ajuste recae sobre la gente y no sobre la casta”, y cuestionó la falta de medidas para amortiguar el impacto en el interior del país.
Insistió en que “el Gobierno Nacional debe priorizar una política energética y tarifaria que dé previsibilidad, en lugar de improvisar con incrementos que solo profundizan la crisis”. “No podemos permitir que la falta de planificación se traduzca en más pobreza y desigualdad”, advirtió.
Finalmente, Arnedo llamó a trabajar en un esquema de costos que contemple la realidad de las provincias y proteja el poder adquisitivo de los ciudadanos. “Esto no se resuelve cargando todo sobre los hombros de la gente. Es momento de decisiones responsables que piensen en el bienestar colectivo y no solo en cerrar números y estadísticas”, concluyó.