El gobernador Osvaldo Jaldo volvió a marcar distancias con el kirchnerismo de cara a los comicios legislativos nacionales del 26 de octubre, cuando Tucumán renovará cuatro bancas de diputados.
Si bien dijo que el peronismo en la provincia buscará priorizar el diálogo con todos los sectores para presentar una lista de candidatos que surja del consenso, ratificó que no modificará su postura dialoguista con la Nación y en defensa de los intereses de Tucumán por encima de cuestiones partidarias. “Desde Buenos Aires y con un bloque de 100 diputados mayoritariamente porteños no nos van a decir cómo tenemos que votar”, sentenció.
Además, reivindicó el trabajo de los diputados Agustín Fernández, Gladys Medina y Elia Fernández de Mansilla, quienes le responden y durante todo 2024 acompañaron la mayoría de los proyectos promovidos por el Gobierno del presidente Javier Milei, de quien el gobernador es aliado estratégico. “Para nosotros primero están los tucumanos, por eso conformamos el Bloque Independencia. Hemos realizado a nivel nacional y provincial muchas cosas en beneficio de los tucumanos. Nosotros gobernamos para el 1.900.000 tucumanos”, remarcó al marcar distancia con el bloque kirchnerista de Unión por la Patria.
Sobre el armado del PJ para octubre, Jaldo ratificó la idea de buscar la unidad. “Tenemos hombres o mujeres dentro de nuestro espacio político que reúnen todas las condiciones y califican para ocupar una lista para las elecciones de octubre. Lo que ocurre es que nosotros vamos a definir candidatos por la vía de consenso dentro de nuestro espacio a partir del diálogo con el vicegobernador, Miguel Acevedo; la intendenta, Rossana Chahla; el presidente subrogante de la Legislatura, Sergio mansilla; el ministro del Interior, Darío Monteros; legisladores provinciales, intendentes y delegados comunales”, puntualizó el mandatario tucumano durante una entrevista televisiva concedida al programa Los Primeros.
Además, recordó que el peronismo trabaja en equipo “para gobernar y para los momentos electorales” y reiteró que no será él quien elija los candidatos. “Tenemos hombres y mujeres que califican perfectamente, pero tenemos que tomar la decisión de común acuerdo”, insistió.
A continuación, reiteró que el PJ debe llevar como candidatos a dirigentes que estén dispuestos a defender los intereses de la provincia. “Vamos a llevar la mejor propuesta a los tucumanos. A Tucumán lo tenemos que cuidar entre todos. Y luego del mes de octubre que pasen las elecciones hay dos años más de gestión. Necesitamos diputados que defiendan Tucumán y que prioricen los problemas y necesidades de nuestra provincia. Que no voten por mandato de bloque cosas que no favorezcan a Tucumán”, remarcó.
En la misma línea, el primer mandatario provincial sostuvo que los candidatos del peronismo “van a responder directamente a las políticas provinciales de gobierno que se fijen en salud, seguridad, educación y desarrollo social, fundamentalmente en apoyo a las economías regionales”.
Por último, sostuvo que el sector político debería “dejar diferencias personales de lado” y trabajar en conjunto por el país.
La “deuda de los argentinos” con Francisco
En otro tramo de la entrevista, Jaldo se refirió al legado que dejó el Papa Francisco y reflexionó sobre las divisiones políticas en nuestro país como factor determinante para que no haya visitado Argentina durante sus 12 años de pontificado.
“Ese Papa argentino, que visitó más de 70 países y que tendría que haber venido, pisado el suelo argentino y abrazarnos a todos los argentinos en su mandato papal no vino no porque él no quiso o porque no lo deseaba. El Papa no vino a la Argentina porque los argentinos no hemos sido capaces de crear las condiciones necesarias e indispensables para que él vuelva a su país, no supimos estar a la altura de las circunstancias”, subrayó.
Según Jaldo, el motivo de esa decisión del Papa fue “que los argentinos tenemos diferencias políticas que no sabemos superar y es por eso que la Argentina no arranca como debe arrancar en los otros ámbitos de la vida”. Y amplió: “Por eso tenemos los problemas que hoy tenemos, los indicadores que tanto daño nos hacen de pobreza y de indigencia y es por eso que cada vez que viene un gobierno tiene que empezar de nuevo porque no sabemos limar asperezas, ni ponernos de acuerdo, ni sabemos escucharnos”.
El gobernador dijo que “primero están los problemas de la gente” y se mostró contrariado por las críticas que recibe por su postura dialoguista con la Nación. “Si lo normal es escucharse, es el trabajo mutuo y recíproco de un municipio con una provincia, de la provincia con el gobierno nacional y del gobierno nacional con una provincia”, remarcó.
Al ser consultado sobre la enseñanza fundamental de Jorge Bergoglio, el Gobernador subrayó que fue “dejar las diferencias de lado y, fundamentalmente, atender con mucha responsabilidad los roles que cada uno tiene asignado”.