
Noticias Argentinas confirmo que el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, denunció este domingo un intento de golpe de Estado, impulsado —según afirmó— por “una alianza criminal” encabezada por la fiscal general Consuelo Porras y el juez Fredy Orellana.
Durante un mensaje transmitido en cadena nacional, Arévalo acusó a ambos funcionarios de intentar “hundir a Guatemala en el autoritarismo, la corrupción y la impunidad”. Explicó que el juez Orellana “tergiversa las leyes al servicio de Consuelo Porras e intenta forzar al Tribunal Supremo Electoral a distorsionar los resultados de las elecciones de 2023, motivando la destitución inconstitucional de un alcalde, de 23 diputados electos por el Movimiento Semilla, de la vicepresidenta de la República y de su presidente”.
El mandatario advirtió que tanto Porras como Orellana “han creado un contexto de terror” mediante procesos judiciales ilegítimos y denunció que ese “macabro procedimiento” ha llevado a prisión a ciudadanos honestos, entre ellos autoridades indígenas, abogados y periodistas que defendieron la democracia.
Arévalo fue contundente al señalar que los responsables “quieren hundir a Guatemala” y que el objetivo de los golpistas es perpetuar “la impunidad de los ladrones del dinero de todos, de los narcotraficantes y de sus aliados políticos”.
Según el jefe de Estado, la ofensiva judicial busca “impedir el rescate de las instituciones democráticas y crear condiciones para corromper los procesos de elección de órganos de justicia en 2026 y las elecciones de 2027”.
Frente a esta situación, Arévalo anunció que solicitó una sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), amparado en la Carta Democrática Interamericana, con el fin de denunciar ante el continente “las graves amenazas a nuestra Constitución y nuestra democracia”.
Pidió además que la Corte Suprema de Justicia proceda de manera inmediata a la destitución del juez Fredy Orellana, al considerar que “no se puede permitir que un juez siga atentando contra la voluntad popular”. También exhortó a la Corte de Constitucionalidad a garantizar la protección de los resultados electorales de 2023.
En la parte final de su mensaje, Arévalo convocó a todos los sectores del país a unirse en defensa de la institucionalidad democrática. Enfatizó que este es “un momento histórico” para Guatemala y subrayó que lo que está en juego “no es un gobierno ni un partido, sino el cimiento de la democracia y el respeto a la voluntad del pueblo”.