
Noticias Argentinas difundió que el triunfo electoral de La Libertad Avanza (LLA) le dio aire al presidente Javier Milei, quien, con el impulso político de los resultados, planea introducir cambios importantes en su equipo de gobierno. Aunque se muestra más calmo, el mandatario se tomará hasta el 10 de diciembre para definir los movimientos en el Gabinete.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, que llegó al fin de semana electoral con signos de agotamiento, parece haber recuperado crédito ante el Presidente y, según fuentes oficiales, continuará en el cargo al menos hasta el 10 de diciembre.
Incluso, este jueves acompañará a Milei en la primera gran reunión con gobernadores aliados en Casa Rosada, donde se buscará comenzar a tejer acuerdos políticos que permitan al Ejecutivo impulsar las reformas de segunda generación.
Sin embargo, en la entrevista que Milei brindó el lunes posterior a la elección —la primera tras la victoria—, el propio Presidente dejó entrever dudas sobre el futuro de Francos. Señaló que “Guillermo Francos tiene un rol muy destacado dentro del Gobierno” y agregó que “veremos, a la luz del nuevo Gabinete, cómo van a quedar las cosas”.
La frase fue interpretada como una señal de incertidumbre y abrió especulaciones sobre posibles cambios en la Jefatura de Gabinete. Una situación similar se da en el Ministerio del Interior, que hoy ocupa Lisandro Catalán, hombre cercano a Francos, y que podría seguir el mismo camino en caso de que su mentor deje el cargo.
Mientras tanto, la posibilidad de nuevas modificaciones en el Gabinete gana fuerza, con dos nombres que suenan con insistencia como posibles reemplazos.
Los resultados electorales del domingo alteraron los equilibrios internos en el oficialismo. La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, fue considerada “la gran ganadora” dentro del entorno libertario, y se espera que la futura designación tenga su aval directo. En ese contexto, gana terreno la figura del vocero presidencial, Manuel Adorni, recientemente electo legislador, como posible sucesor de Francos.
Antes de las elecciones, el asesor presidencial Santiago Caputo era el principal candidato a ocupar el cargo, impulsado por funcionarios que pedían formalizar su rol dentro del esquema de poder. Milei no veía con malos ojos esa posibilidad.
En los últimos días, trascendió además que Caputo podría ocupar el despacho de Catalán, en la planta baja de la Casa Rosada, un piso por debajo de la Jefatura de Gabinete, aunque fuentes cercanas al consultor desmintieron esa versión.
En los pasillos de Balcarce 50, los funcionarios resumen el clima interno con una frase repetida: “Las cosas tenían una lógica y, con el resultado de la elección, todo está sometido a un reseteo”. En el entorno libertario, esperan los primeros cambios “más temprano que tarde”, convencidos de que el Presidente aprovechará el envión político para reordenar su equipo antes de fin de año.