El diputado Carlos Cisneros enfrenta una denuncia por presuntas maniobras fraudulentas y coacción.
El futbolista José Florentín, a través de sus abogados, presentó una nota dirigida al presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Martín Menem, para interiorizarlo sobre la denuncia penal presentada la semana pasada contra el parlamentario tucumano Carlos Cisneros, a quien acusa de haber operado para perjudicarlo en una causa por presunto abuso sexual.
Según confirmaron fuentes parlamentarias a Tendencia de Noticias, el escrito, con la firma de los abogados Camilo Atim y Florencia Abdala, ingresó a la Presidencia de la Cámara Baja este jueves 2 de octubre.
El objetivo de la presentación no es otro que informar institucionalmente al Congreso sobre la acusación que pesa contra uno de sus miembros, a fin de que las autoridades evalúen las medidas que consideren pertinentes.
Según confirmaron las fuentes parlamentarias, en el escrito Florentín asegura que Cisneros habría “utilizado falsas denuncias como método extorsivo, valiéndose de una estructura conformada por abogados, asesores, colaboradores personales y empleados del sindicato de La Bancaria”, al que también pertenece el diputado peronista.
La denuncia penal en cuestión, identificada como causa S-077592/2025, se encuentra actualmente en trámite ante la Unidad Fiscal Especializada en Delitos Complejos de Tucumán, a cargo de la fiscal Mariana Rivadeneira. En su denuncia, Florentín acusó por falso testimonio a la joven tucumana que en 2024 lo denunció por abuso sexual junto a otros exfutbolistas de Vélez Sarsfield. Además, apuntó contra allegados de la supuesta víctima, abogados y el diputado Cisneros, quienes, según el deportista, habrían montado una red delictiva con el fin de perjudicarlo en la causa por violación, borrando pruebas clave y coaccionando a testigos.
En la nota dirigida a Menem, Florentín recuerda que en el expediente impulsado por sus abogados “se investiga el presunto funcionamiento de una red dedicada a destruir pruebas, manipular procesos judiciales y extorsionar a personas imputadas mediante la amenaza de denuncias falsas o la promesa de evitar acciones judiciales a cambio de acuerdos espurios”.
En el documento presentado ante el Congreso, los abogados del futbolista destacan dos aspectos que consideran de extrema gravedad institucional:
a) “la utilización de denuncias falsas como una práctica sistemática y extorsiva”, y
b)"el perjuicio particular que esta metodología representa para los derechos fundamentales de las mujeres, al desviar recursos judiciales de causas reales y aprovechar situaciones de vulnerabilidad económica para cooptar testigos o denunciantes falsos”.
En el escrito se advierte que “esta metodología perversa no solo afecta a las víctimas directas de estas falsas acusaciones, sino que debilita el sistema judicial y pone en cuestión la integridad de las instituciones”.