Momento del accidente, tomada por Rodrigo Abd
Luego de casi 90 días de internación, Pablo Grillo fue dado de alta del Hospital Ramos Mejía este martes. El fotoperiodista había sufrido un severo traumatismo de cráneo el 12 de marzo, al ser impactado en la frente por una cápsula de gas lacrimógeno lanzada por un efectivo de Gendarmería Nacional, mientras cubría una manifestación de jubilados en la Plaza Congreso. Su salida del hospital estuvo marcada por la emoción: familiares y amigos lo esperaron entre aplausos, lágrimas y cantos. Ahora, continuará su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca.
Durante su internación, Grillo atravesó múltiples intervenciones médicas, incluyendo una cirugía por hidrocefalia luego de que se detectaran complicaciones neurológicas. La cuenta de Instagram “Justicia por Pablo Grillo” se convirtió en un canal clave para informar sobre su estado de salud y reclamar justicia. Allí, su familia agradeció públicamente el acompañamiento y el compromiso de quienes lo apoyaron en todo momento. “Gracias eternas por el cariño y el apoyo”, expresaron, destacando la importancia del hospital público y del cuerpo médico en la recuperación de Pablo.
El hecho ocurrió en un contexto de tensión social durante una marcha al Congreso en la que se registraron enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad. Un video captado por un drone y difundido por Infobae mostró el instante exacto en el que Grillo fue alcanzado por el proyectil, contradiciendo la versión oficial que aseguraba que el agente había actuado bajo protocolo. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, respaldó al uniformado, aunque las imágenes revelaron un impacto directo a la cabeza del reportero gráfico. Ahora, su familia y colegas exigen avances en la investigación para que se haga justicia.