En un nuevo y significativo escalada del conflicto, el Ejército de Israel confirmó este martes la muerte de Ali Shadmani, el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas iraníes y hombre de máxima confianza de Ali Jamenei, el líder supremo de Irán. Shadmani falleció en un bombardeo nocturno contra un centro de mando ubicado en Teherán, la capital iraní.
"Por segunda vez, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han eliminado al jefe del Estado Mayor de Irán, el principal comandante militar del régimen", indicó el ejército israelí en un comunicado.
La operación, calificada por las FDI como una "repentina oportunidad durante la noche", tuvo como objetivo a Shadmani, a quien describieron como "la figura más cercana al líder supremo de Irán". El alto mando iraní había asumido el cargo apenas unos días antes, el 13 de junio, tras el asesinato de su predecesor, Qolamali Rashid, en otro ataque israelí el viernes pasado. Israel sostiene que Shadmani desempeñó un papel crucial en la planificación de operaciones militares dirigidas contra su territorio, habiendo influido "directamente en los planes operativos de Irán para atacar al Estado de Israel" durante los últimos años. Aunque las autoridades iraníes no han confirmado oficialmente su muerte, el Ejército israelí considera que su eliminación representa un golpe significativo a la cadena de mando de las fuerzas armadas iraníes.
La muerte de Shadmani se produce en un contexto de intensa confrontación directa entre Israel e Irán, que comenzó el viernes con una amplia campaña aérea israelí contra instalaciones estratégicas iraníes. Desde el ejército israelí aseguraron que la operación buscaba frenar los avances del programa nuclear de Irán y neutralizar su capacidad de lanzar misiles balísticos, bombardeando centros nucleares como Natanz, Isfahán y Fordu, así como almacenes de misiles y sistemas de defensa aérea. En la noche del lunes, Israel también interceptó cerca de 30 drones lanzados desde Irán, aunque las fuerzas militares israelíes señalaron que fue una de las noches más tranquilas desde el inicio de la escalada, con Irán disparando menos de 10 misiles sin causar víctimas ni daños importantes. Desde el comienzo del conflicto, Irán ha lanzado al menos 380 misiles balísticos hacia Israel, con un saldo de al menos 229 muertos en Irán (incluyendo altos mandos y científicos) y 24 en Israel.