La preocupación crece en el sur de Tucumán. Según un reporte del medio El Tucumano, diversas localidades rurales de la provincia, como Simoca, Alberdi, Graneros y La Cocha, están bajo la lupa por la supuesta existencia de pistas clandestinas y vuelos narco. Testimonios locales afirman que avionetas sobrevuelan campos sin sembrar y que, poco después, aparecen camionetas 4x4 a gran velocidad, en operativos que despiertan sospechas. La llamada “ruta de los valles”, que conecta Salta con Tafí del Valle y continúa por varias localidades tucumanas, estaría siendo utilizada como nuevo corredor para el tráfico de drogas, principalmente cocaína.
Pese a algunos controles eventuales, la falta de cobertura aérea y la escasa presencia permanente de fuerzas de seguridad permiten que estos movimientos pasen desapercibidos. Aunque la Policía provincial mantiene un puesto fijo en Colalao del Valle y Gendarmería refuerza ciertos operativos, los caminos alternativos que conectan con rutas nacionales clave siguen desprotegidos. Aun así, las cifras de decomisos aumentaron: en lo que va del año, se incautaron más de 600 kilos de cocaína en la zona, el doble que el año pasado. “No falta mucho para que tengamos más hombres y recursos tecnológicos para mejorar aún más la tarea”, aseguró el secretario de Lucha contra el Narcotráfico, Jorge Dib.
En este escenario, las denuncias vecinales cobran fuerza. Desde Simoca hasta Alberdi, habitantes de zonas rurales afirman ver avionetas sobrevolar terrenos sin cultivo. “Dicen que fumigan, pero no hay nada sembrado”, señaló un lugareño.
Las autoridades nacionales, por su parte, reconocen que las pistas clandestinas en áreas rurales son un punto débil en la lucha contra el narcotráfico. “Pasamos de ser territorio de paso a ser zona de operación”, advirtió el Foro de Seguridad Rural Argentina en un documento elevado al Ministerio de Seguridad. La presión para reforzar la vigilancia en el sur tucumano crece, mientras persiste el temor de que estos vuelos ilegales se conviertan en una constante impune.