La Policía defendió su accionar tras los incidentes con hinchas visitantes de Rosario Central

El operativo de seguridad del partido entre Atlético Tucumán y Rosario Central quedó en el centro de la polémica luego de los incidentes registrados en la avenida Juan B. Justo, donde un grupo de colectivos con simpatizantes del equipo rosarino terminó con vidrios destrozados y enfrentamientos en la vía pública. Videos difundidos en redes sociales mostraron la violencia desatada y señalaron que la situación se habría originado por la falta de coordinación en los horarios de salida de ambas parcialidades. Testigos aseguraron que algunos micros visitantes circularon sin escolta, lo que facilitó los ataques con piedras y ladrillos.

Enzo Sánchez, hincha del “Decano” presente en el lugar, relató que la agresión comenzó a la altura de avenida Chile y se extendió hasta calle Italia. Según su testimonio, varios ómnibus fueron impactados y algunos simpatizantes de Rosario Central descendieron para agredir a personas en la zona. “Fue espantoso, no pasó una tragedia de milagro”, lamentó, describiendo una escena caótica con proyectiles cruzando el aire y escombros dispersos por la calle.

Desde el Ministerio de Seguridad, el titular Eugenio Agüero Gamboa afirmó que no se registraron denuncias formales y defendió el accionar policial, destacando que el operativo se cumplió “muy bien”. Por su parte, el jefe de Policía, Joaquín Girvau, detalló que al ingreso a la provincia se requisó a la hinchada visitante, secuestrando bebidas alcohólicas y objetos cortantes, además de detener a cinco personas por distintas infracciones. “Sabíamos con quién nos íbamos a encontrar, no son hinchas fáciles de manejar”, remarcó.

Girvau agregó que el ingreso al estadio se realizó bajo estrictas condiciones: entrada y DNI en mano, sin gorras y en silencio. También señaló que, aunque la salida del estadio fue normal, se produjeron “hechos puntuales” que no empañan, a su entender, el despliegue de más de 400 efectivos. El comisario fue enfático al advertir que en Tucumán “no se va a permitir” que ninguna hinchada actúe con impunidad, y recordó que la barra de Rosario Central es considerada conflictiva incluso en su propia provincia.

Tras una reunión en Casa de Gobierno con el gobernador Osvaldo Jaldo, se anunció que se evaluarán ajustes para futuros partidos con público visitante. “En Tucumán no van a hacer lo que quieren, acá se respeta y nos van a respetar”, concluyó Girvau, dejando en claro que la prioridad será garantizar la seguridad, incluso si eso implica medidas más estrictas para el ingreso y traslado de las hinchadas.