La intendenta Rossana Chahla encabezó este lunes una reunión de gabinete en la sede municipal de 9 de Julio y Lavalle, donde se definieron prioridades ante la inminente llegada de lluvias intensas previstas para octubre, noviembre y diciembre. El objetivo principal: reforzar operativos en zonas vulnerables y coordinar acciones preventivas para evitar anegamientos.
Durante el encuentro con secretarios, subsecretarios y directores de distintas áreas, se establecieron dos ejes de trabajo prioritarios. Por un lado, la necesidad de sostener y ampliar las tareas de limpieza de canales y sistemas de desagüe; por otro, avanzar con un relevamiento en asentamientos ubicados a la vera del Río Salí y de canales, considerados críticos por su alta exposición a inundaciones.
Este último operativo será coordinado con el Ministerio de Desarrollo Social de la Provincia, con el fin de buscar soluciones estructurales para las familias que residen en zonas de riesgo. “Tuvimos una larga reunión, como hacemos siempre, en una sala de situación con todos los funcionarios. Pero la temática que más nos preocupa y nos ocupa es la de las inundaciones”, afirmó la intendenta.
Chahla advirtió que uno de los principales factores de riesgo radica en la localización de asentamientos en terrenos no aptos para viviendas. “San Miguel de Tucumán y muchas localidades del Gran San Miguel tienen asentamientos a la vera del Río Salí. En esos lugares es imposible hacer una obra que evite que se inunden”, subrayó.
“Cada vez que limpiamos la vera del río y reubicamos a las familias, otras personas se instalan en el mismo lugar. Eso hace muy difícil evitar las inundaciones”, alertó.
La intendenta explicó que, junto al gobierno provincial, se está realizando un censo casa por casa en las zonas más críticas para planificar reubicaciones y ofrecer alternativas habitacionales seguras.
“Esas personas tienen que ser trasladadas a lugares donde no corran riesgo cada vez que llueve. Las lluvias van a ser más intensas, ya lo estamos viendo. El cambio climático nos afecta a todos”, alertó.
Llamado a la comunidad: no arrojar basura
Chahla también puso el foco en la necesidad de mantener limpios los canales pluviales, que suelen obstruirse con residuos arrojados de forma irresponsable. “Estamos limpiando los 24 canales que tiene San Miguel de Tucumán y están llenos de basura. Hemos encontrado desde botellas hasta un lavarropas. Necesitamos que nos ayuden, porque el municipio solo no puede”, lamentó.
“Estamos proyectando grandes obras hídricas, pero necesitamos financiamiento. Mientras tanto, el acompañamiento de los vecinos es clave: no tirar basura en la calle es una de las formas más importantes de prevenir anegamientos”, insistió.
Por su parte, el secretario de Servicios Públicos, Luciano Chincarini, brindó detalles sobre los trabajos preventivos que se están realizando en la ciudad. “Tenemos un plan en ejecución que contempla la limpieza de los 24 canales de desagüe de San Miguel, que totalizan 23 kilómetros. También intervenimos en más de 2.600 imbornales”, explicó.
Según el funcionario, las tareas de mantenimiento se intensificaron durante el invierno para preparar el sistema de drenaje antes del inicio de la temporada de lluvias. “Además de limpiar los canales, reemplazamos losas de hormigón en los revestidos y rectificamos la sección de los que no lo están. También recolectamos residuos en las zonas aledañas. Por eso, no hay justificación para que los vecinos arrojen basura en los canales”, remarcó.
Chincarini confirmó que, por instrucción de la intendenta, este jueves se convocará una nueva reunión del Comité de Crisis para coordinar medidas ante posibles eventos climáticos extremos. “Hace más de 50 años que no se hacen obras pluviales en San Miguel de Tucumán. Por eso trabajamos junto a la intendenta en proyectos de infraestructura y buscamos financiamiento externo. El municipio, por sí solo, no puede afrontar el costo de estas grandes obras”, concluyó.