Franco Colapinto afrontó su segunda clasificación en la Fórmula 1 de 2025 bajo un escenario desafiante: el tradicional y estrecho trazado de Mónaco. En apenas su segunda aparición con el equipo Alpine, el piloto argentino volvió a evidenciar las dificultades de adaptación tanto personales como del auto, que sigue sin mostrar señales de competitividad. Tras su debut en Imola con un accidente en la qualy y un 16° puesto en carrera, esta vez logró completar la jornada sin incidentes, pero sin resultados alentadores.
En una clasificación marcada por los riesgos tomados y las limitaciones del A525, Colapinto no pudo avanzar más allá de la Q1. Luego de tres vueltas con neumáticos medios y una tentativa con los blandos frustrada por un accidente de Kimi Antonelli, el pilarense terminó 20° en los tiempos, aunque las sanciones a Oliver Bearman y Lance Stroll le permitieron escalar hasta el 18° lugar en la grilla del domingo. Su compañero, Pierre Gasly, también quedó eliminado en la primera parte de la qualy.
El argentino lamentó el bajo rendimiento del monoplaza y aseguró no sentirse cómodo, especialmente con los neumáticos blandos, que consideró difíciles de controlar por el sobrecalentamiento. “Esperábamos estar más cerca, pero el balance no fue el ideal y no logramos sacarle provecho al auto”, comentó. Aunque sumó valiosos kilómetros sin errores graves, la posibilidad de sumar puntos en Mónaco parece lejana, debido a la dificultad de los sobrepasos en un circuito tan angosto.
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