El legislador provincial Manuel Courel, (Cambia Tucumán), expresó su firme oposición al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) impulsado por el gobernador Osvaldo Jaldo, que busca autorizar contrataciones directas para las obras del programa PROCREAR Tucumán. Este proyecto, considerado actualmente el emprendimiento habitacional más grande en Argentina, contempla la construcción de 1.656 viviendas, 1.491 lotes con servicios y 50 locales comerciales en un predio de 100 hectáreas, con un impacto estimado en más de 7.000 empleos directos. En esta primera etapa, prevista para iniciarse hacia mediados de julio, se prevé la construcción de más de 500 casas con una inversión estimada de $70 mil millones. Sin embargo, las formas de ejecución propuestas por el Ejecutivo provincial generaron controversia.
Courel dejó en claro su postura: “No cuestiono la necesidad del plan PROCREAR en Tucumán. Al contrario: celebro que el Estado provincial asuma el compromiso de avanzar con las viviendas en Manantial Sur. Pero sí cuestiono la forma en que se pretende llevar adelante esta iniciativa”. Según el legislador, el DNU que se debatirá en la Legislatura este jueves faculta a los ministerios de Economía y Obras Públicas a contratar obras sin licitación pública ni cotejo de precios, lo que considera un grave retroceso en términos de transparencia. “Es decir, sin competencia. Sin precios de referencia. Sin transparencia. Y sin controles”, afirmó.
El proyecto PROCREAR Tucumán, que había sido paralizado tras la interrupción del financiamiento nacional por decisión del gobierno de Javier Milei, fue rescatado mediante gestiones del gobernador Jaldo con el Ministerio de Economía de la Nación. En marzo de 2025, Jaldo firmó un acuerdo con el ministro Luis Caputo para la transferencia del predio y las obras ya ejecutadas, asumiendo la provincia el financiamiento con recursos propios. Según el mandatario, esta iniciativa permitirá reactivar la construcción y aliviar el déficit habitacional en la provincia, generando un impacto económico significativo.
Sin embargo, Courel alertó sobre los riesgos de la metodología propuesta por el DNU: “Parece que no aprendió nada. Mientras Milei paralizó la obra pública porque encontró un sistema totalmente corrupto (por caso, la reciente condena a Cristina Kirchner), aquí se promueve un terreno fértil para la corrupción”. El legislador hizo referencia al historial de irregularidades en la obra pública en Tucumán, señalando a Manantial Sur como “el símbolo del fracaso de la obra pública” en la provincia. “Años de anuncios, de marchas y contramarchas, de inicios de obra y de abandonos. Nunca supimos cuánto nos costaron esas viviendas. Y ahora, menos lo sabremos”, agregó.
El DNU levantó críticas, no solo por la falta de licitaciones públicas, sino también por la ausencia de mecanismos que garanticen la rendición de cuentas. Courel insistió en la necesidad de avanzar con el proyecto, pero bajo un marco de transparencia: “¿Queremos que las obras se hagan? Sí. Tucumán necesita esas viviendas. Pero con transparencia, con licitaciones públicas y rindiéndole cuentas a cada tucumano”.