Mariano Navone dio pelea durante más de tres horas en el Suzanne-Lenglen, el segundo estadio más importante de Roland Garros. Con un primer set impecable, logró descolocar al italiano Lorenzo Musetti, número 7 del mundo, y se ilusionó con una hazaña. Pero la jerarquía del europeo se impuso con el correr del partido y selló la victoria por 4-6, 6-4, 6-3 y 6-2, eliminando al último argentino en el cuadro de singles del torneo.
El tenista de 9 de Julio llegaba en un momento irregular, pero había recuperado confianza tras vencer al preclasificado Brandon Nakashima y al gigante Reilly Opelka. Con esos triunfos alcanzó por primera vez la tercera ronda de un Grand Slam, pero frente a Musetti, especialista en polvo de ladrillo, no pudo sostener la intensidad y la precisión inicial. La remontada del italiano fue progresiva y contundente, cerrando el duelo con mayor potencia, menos errores y mayor experiencia en este tipo de escenarios.
Con la eliminación de Navone, se quebró una racha de siete años consecutivos con presencia argentina en octavos de final de Roland Garros. Si bien algunos casos, como el de Francisco Cerúndolo, generaron menos alarma por su actualidad en el circuito, el panorama general dejó gusto amargo. Roland Garros, históricamente un bastión para el tenis argentino, esta vez no ofreció festejos ni puntos de partida. Al menos en los cuadros individuales.
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